¿Cómo hay que limpiar/mantener la cámara y las lentes?

El problema más habitual con el que se encuentran los fotógrafos es la presencial de polvo o manchas en el sensor o la lente de la cámara. Esto podría tener consecuencias fatales para las fotos.
A veces se piensa, equivocadamente, que las manchas que aparecen en las fotos proceden del espejo, del visor óptico o de la lente, pero no suele ser el caso. El polvo que hay en el espejo o el visor no afecta en absoluto a la presentación final de la foto. En cuanto al polvo de la lente, quedaría demasiado lejos del punto de enfoque para que se obtuviera un enfoque nítido. A veces esto puede ocurrir con una lente de ojo de pez, pero casi nunca con una lente estándar.
Por lo general, es el polvo que está infiltrado dentro del cuerpo de la cámara y que se ha fijado en el sensor el que genera este resultado. Esto solo puede ocurrir cuando se cambia la lente.
Se recomienda encarecidamente cambiar la lente solamente cuando sea necesario y dirigir el cuerpo de la cámara hacia abajo mientras se hace. Asimismo, siempre es mejor cambiar la lente en un entorno en el que no haya mucho polvo o arena.
También debe asegurarse de que las lentes estén limpias: cada vez que las cambie. Limpie la parte posterior de las lentes con un paño de microfibra y sustituya siempre la tapa de lente cuando no la esté utilizando. De forma similar, no quite la tapa de lente hasta que esté preparado para empezar a hacer fotografías.
Cómo comprobar el sensor
Siga estos pasos para comprobar si hay polvo en el sensor:
- Acople una lente a la cámara.
- Seleccione el enfoque manual (M) mediante el selector de ajustes y establezca el enfoque en infinito, la compensación de exposición en +1 y elija la apertura más pequeña (el número más alto), que será f/22 o, en algunas lentes, f/32.
- Apunte la lente hacia una fuente de luz uniforme que ocupe toda la imagen (por ejemplo, una ventana o el cielo) y saque un foto. No se preocupe si la exposición tarda unos segundos. No necesita soporte porque el enfoque está establecido en infinito.
- Compruebe la imagen. Si aparecen manchas negras significa que debe limpiar el sensor.
Tenga en cuenta que con aperturas más grandes, el polvo es menos visible. A partir de f/8, este es invisible. Si aparecen manchas en las fotos cuando se utilizan aperturas amplias, puede que el sensor esté dañado y que necesite repararlo.
Cómo limpiar el sensor
1. Sistema de limpieza interno de la cámara
Su Sony Digital SLR está equipado con un sistema de limpieza automático del sensor que se activa cada vez que se apaga la cámara. Además, el filtro de paso bajo que cubre la superficie del sensor está hecho de un material antiestático que evita que se fijen partículas en la medida de lo posible. Desafortunadamente, es imposible evitar al 100% que se filtre polvo, especialmente si se trata de un entorno donde hay mucho polvo. Si aparecen manchas oscuras en las fotos, puede activar un sistema de limpieza más intenso seleccionando la función de limpieza en el menú de la cámara.
2. Limpieza manual
Si con el método anterior no se consigue eliminar las partículas aceitosas que están muy fijadas (por ejemplo, el polen), deberá recurrir a la limpieza manual. Aviso importante: Sony no se hace responsable de los daños que puedan derivarse de un manejo incorrecto durante la limpieza del sensor. Seleccione la función de limpieza en el menú de la cámara. La cámara se apaga y, si saca la lente, observará que ahora el sensor está visible. Dirija el cuerpo de la cámara hacia abajo y utilice un soplador de polvo para soplar aire hacia el sensor.
Lleve a cabo este procedimiento en un lugar limpio y donde no haya polvo.
El soplador nunca debe entrar en contacto con el sensor. De lo contrario, el sensor podría sufrir daños irreparables.
No sople con la boca. Esto no solo provocaría que entrara humedad en el cuerpo de la cámara, sino que las partículas de saliva también podrían dañar el sensor.
Asimismo, tampoco se recomienda utilizar los pulverizadores de aire que están diseñados para limpiar los equipos informáticos (teclado, etc.). La fuerza de estos podría dañar el sensor y en el cuerpo de la cámara podría entrar humedad y otros residuos.
Se recomienda encarecidamente no utilizar un cepillo ni ninguna otra de las soluciones de limpieza que existen en el mercado. Esto aumenta el riesgo de dañar el sensor y el filtro de paso bajo.
En caso de duda, póngase en contacto con Sony para obtener más información.
Cómo limpiar y mantener el cuerpo de la cámara y las lentes
La limpieza del cuerpo de la cámara y las lentes es fundamental para mantener el equipo en buen estado, pero también es un procedimiento delicado. Por eso la mejor forma de mantenerlo en buenas condiciones es cuidarlo bien:
- Sustituya siempre las tapas de la lente.
- Guarde las lentes en una funda protectora.
- Transporte el equipo de la cámara en una bolsa adecuada.
También puede aparecer condensación si se encuentra en una zona muy húmeda o si se traslada de un lugar frío a otro cálido. Esta condensación puede dar lugar a la oxidación de algunas de las partes metálicas del interior del cuerpo, lo que podría provocar un mal funcionamiento. Además, se podría desarrollar la aparición de hongos y moho que podría dañar el equipo. Para reducir este riesgo, se aconseja colocar saquitos de gel de sílice en el interior de la bolsa de transporte. El gel de sílice ayudará a absorber parte de la humedad.
Al manejar el equipo, se puede depositar polvo u otras partículas en el cuerpo de la cámara o en las lentes y también pueden aparecer huellas. A continuación se indica como eliminar estos elementos sin dañar el equipo.
1. Cuerpo de la cámara
Después de pasar un día en la playa, por ejemplo, se pueden depositar granos de arena en las ranuras del cuerpo de la cámara. Si no se eliminan inmediatamente, pueden pasar al selector de ajustes y adelantar el desgaste de la cámara hasta dejarla inutilizable. También pueden seriamente dañar las anillas de enfoque de la lente.
La solución más sencilla para eliminar estas partículas es cepillar la parte exterior del cuerpo utilizando un cepillo de cerdas suaves. No ejerza mucha presión, ya que podría arañar el cuerpo o la pantalla LCD.
Si no puede eliminar el polvo incrustado con un cepillo, también puede utilizar un bastoncillo de algodón. Para aquellas zonas de difícil acceso, el soplador de polvo suele resultar eficaz.
Finalmente, si el cuerpo de la cámara se ha manchado de sustancias difíciles de eliminar (como barro), puede utilizar perfectamente un paño de microfibra (se puede obtener fácilmente en una óptica) humedecido ligeramente en agua. Se recomienda la microfibra porque este tejido no araña la pantalla LCD.
No utilice productos químicos como disolventes, bencina, alcohol o toallitas desechables.
2. Lentes
Las lentes se deben tratar con especial cuidado. El cristal que las forma es muy frágil y se araña con mucha facilidad. Las lentes solo deben limpiarse como último recurso. Cada vez que se limpian, la superficie óptica se ve afectada. Siempre quedan marcas, incluso aunque no se vean a simple vista. Es mejor tener una lente con un poco de polvo que una lente arañada.
Opinamos que es fundamentar limpiarlas si observa huellas. Por naturaleza, estas sol aceitosas y ácidas y pueden dañar el revestimiento antirreflexión de la lente. Las gotitas de agua secas y la bruma del mar contienen cristales de sal que también pueden dañar el cristal y que, por lo tanto, se deben eliminar.
Eliminación de polvo y micropartículas
En primer lugar, utilice un soplador para eliminar la mayor parte del polvo. Nunca sople con la boca. De lo contrario, las partículas de saliva en la lente podrían dejar marcas difíciles de eliminar.
A continuación, utilice un cepillo de cerdas muy suaves para eliminar el polvo de la lente. No toque las cerdas del cepillo con los dedos, ya que estas podrían quedar aceitosas y provocar manchas. No ejerza demasiada presión. Después de pasar un día en la playa, por ejemplo, podrían depositarse micropartículas de cuarzo o sílice en el cristal de la lente y una limpieza inadecuada podría arañar la superficie óptica.
Eliminación de manchas aceitosas y huellas
Como norma general, evite tocar el cristal con los dedos. Si hay huellas en el cristal, nunca las elimine utilizando su propia ropa o con pañuelos de papel. Estas fibras son demasiado ásperas y podrían arañar el cristal.
- Utilice un paño de microfibra y guárdelo en una bolsa o en su bolsa de transporte para evitar que le entre polvo.
- Si necesita utilizar una solución líquida para eliminar las manchas aceitosas, no utilice el agua corriente, dado que las sales que contiene podrían arañar el cristal.
En lugar de ello, humedezca el paño de microfibra con agua desionizada y, sin frotar, aplíquelo con toques por la superficie del cristal.