Muchas veces, las imágenes más sencillas son las más eficaces. Y la sencillez es muy importante en las cinemagrafías. Estas imágenes, a medio camino entre la fotografía y el vídeo, necesitan unos cuidados especiales y una elaboración precisa, pero pueden deleitar al espectador como ninguna otra cosa.
Las mejores cinemagrafías son aquellas en las que no esperas que algo se mueva. Piensas que es una fotografía y, de repente, tu atención se centra en el movimiento. Como son tan sorprendentes, son estupendas para el marketing y cantidad de empresas las usan porque realmente destacan en un newsfeed. Esta, titulada "Black is Back", se hizo para la exposición Villeroy & Boch Bath PhotoArt. El producto de esta cinemagrafía era una bañera blanca y negra, lo que me llevó hacia una coloración prácticamente monocroma.
Para crear la cinemagrafía en mi estudio, conté con el trabajo de la artista del maquillaje Janika Slepnjov, que pintó el cuerpo de la modelo, Kseniia Satarova, de forma que consiguiéramos este aspecto por capas. Todos los objetos tenían que contrastar negro contra blanco. Incluso la sombra del cuello se pintó para añadir contraste. No quería mostrar su cara porque pensé que llamaría mucho la atención, por eso sale de espaldas.
Cuando me puse con la cinemagrafía final, tuve que pensar cómo la imagen y el movimiento —los elementos— combinarían en el software. Utilicé Adobe After Effects con tres elementos: la imagen de Kseniia en la bañera y dos clips, uno que muestra el agua en negro en movimiento, y el otro con el vapor subiendo por encima de su cabeza. Se necesita un movimiento constante en bucle, pero en una sencilla composición como esta es fácil. Basta con tener el clip, cortarlo a la mitad y superponer la primera mitad sobre la segunda. Cuando se difumina la opacidad de 0 a 100 parece que el movimiento es infinito.
Lo más importante es que todo esté completamente estático, y que la composición, el color y la exposición no cambien entre los elementos. Monté la Sony Alpha 7R III en un trípode, y disparé en modo de exposición manual con ajustes de 1/160 s a f/2.8 e ISO 320. Cuando conseguí la imagen que quería, cambié al modo vídeo de la cámara y grabé el movimiento del agua, así que todo quedaba en perfecta sincronía. Por supuesto, Kseniia también tuvo que permanecer quieta. Es estupendo tener una cámara que puede cambiar tan fácilmente entre fotografía y vídeo de alta calidad.
Me he dado cuenta de que a veces haces algo complicado desde el punto de vista técnico y el resultado no llama mucho la atención. No obstante, cuando haces algo sencillo y eficaz, a todo el mundo le gusta. Técnicamente, no fue una cinemagrafía muy complicada, pero definitivamente es una de las más impactantes y populares de la serie. Así que, aunque está entre las más sencillas que he hecho, su impacto ha sido el mayor.
Puedes ver la cinemagrafía original en el sitio web de Virgo aquí
"Doy lo mejor de mí para crear obras que trasciendan la vida cotidiana"