Mickaël, de 40 años, siempre está trabajando en todo tipo de proyectos y nunca puede parar quieto. Le apasiona descubrir cosas nuevas y siempre está buscando la perfección. Como amante de la naturaleza y los viajes desde que tiene uso de razón, su pasión por la fotografía le ha llevado por todo el mundo en los últimos años, a la búsqueda de encuentros increíbles y momentos únicos que capturar, siempre intentando encontrar las luces naturales más espectaculares. Su sensibilidad y sentido del detalle le permiten transmitir emociones universales a través de sus fotografías de paisajes y retratos, independientemente de si se han tomado cerca de su casa en el sur de Francia o durante una de sus aventuras por todo el mundo.