El Sony LE-EA5 es un nuevo adaptador diseñado para aprovechar al máximo los objetivos con montura tipo A en los cuerpos con montura tipo E más recientes. Ofrece un enfoque automático rápido y preciso junto con un disparo continuo a alta velocidad. Gracias a su motor incorporado, permite incluso enfocar automáticamente mediante los objetivos con montura tipo A que no tienen motor integrado, aprovechando la detección de fase de plano focal de la cámara. Todas estas posibilidades se incluyen en un compacto y elegante diseño cilíndrico.
He sido un usuario entusiasta de las cámaras de Sony durante mucho tiempo, pero al cambiar a los cuerpos con montura tipo E hace unos años, mi vieja cámara Alpha 99 II había estado acumulando polvo en el armario. Había reunido bastantes objetivos de calidad a lo largo de los años y, aunque los había ido reemplazando poco a poco a medida que el sistema con montura tipo E se popularizaba, había cogido cariño a un par de ellos. En especial, el teleobjetivo de 300 mm F2.8 G SSM, que era uno de mis favoritos para las fotografías de naturaleza, y el de 70-200 mm F2.8 G SSM II, que siempre he considerado un teleobjetivo de gran nitidez. De modo que me alegré mucho cuando Sony me pidió que probara el nuevo adaptador LA-EA5, ya que me dio una excusa para desempolvar mis viejos objetivos y comprobar si eran tan buenos como los recordaba.
Sony Alpha 9 II con el adaptador LE-EA5 colocado sobre el objetivo de 70-200 mm F2.8 G SSM II
Me he acostumbrado a la velocidad de enfoque de mis Alpha 9 II y 7R IV con mis objetivos FE, pero estaba deseoso de ver cómo las cámaras se ajustarían a mis objetivos antiguos con este adaptador. El primer sitio al que fui era un bosque cerca del pueblo de Hulst. Es uno de mis lugares favoritos y he estado allí muchas veces para fotografiar las hermosas ardillas rojas que abundan en la zona. Opté por el teleobjetivo de 300 mm F2.8 SSM, montado en mi Alpha 7R IV. Lo primero que noté del nuevo adaptador es lo pequeño y cómodo que resulta; no presenta el voluminoso saliente de los adaptadores antiguos.
Me situé cerca de un estanque y no pasó mucho tiempo antes de que aparecieran las ardillas. Tras unos pocos disparos, casi me olvidé de que estaba usando un objetivo antiguo con montura tipo A: la velocidad de enfoque y la precisión eran magníficas. Tampoco estaba seguro de cómo funcionaría el Eye-AF con estos animales, pero no falló a la hora de captar el ojo de la ardilla, y todas las tomas fueron nítidas. Prefiero disparar cámara en mano, ya que me da flexibilidad para volver a encuadrar rápidamente cuando las ardillas se mueven. La estabilización de la cámara compensa fácilmente cualquier pequeño movimiento por mi parte.
Un simpático pájaro también se acerca al estanque para beber.
Mi siguiente escala fue el puerto de Róterdam. A menudo hay numerosas lanchas rápidas navegando y estaba ansioso por comprobar si mi viejo teleobjetivo de 70-200 mm F2.8 G SSM II podría seguir a un sujeto en movimiento.
Como se puede ver, el AF no falló y, una vez fijado en la lancha, mantuvo el enfoque con precisión. El último objetivo que quería probar era mi viejo Zeiss de 16-35 mm F2.8 ZA SSM II, que es una óptica fabulosa. He de admitir que no lo he echado tanto de menos porque mi G Master de 16-35 mm F2.8 tiene mucha nitidez, pero estaba disfrutando tanto usando el adaptador que quería ver cómo funcionaba.
En general, mi experiencia utilizando el adaptador LE-EA5 con mis viejos objetivos con montura tipo A ha sido muy positiva. Todos los objetivos que probé reaccionaron rápidamente y me proporcionaron un enfoque preciso. Lo que más me sorprendió fue la precisión del seguimiento con Eye-AF y AF. El adaptador LE-EA5 es una buena inversión para los fotógrafos que todavía usan sus viejos objetivos con montura tipo A. Tenga en cuenta
"El mal tiempo es un tiempo de color".