Derribar las barreras

Si Luigi Baldelli tuviera que elegir una imagen que resuma su proyecto sobre los carboneros de Calabria (Italia), no podría hacerlo. “En mi opinión, una imagen no puede resumir las complejidades de la situación. La mejor manera de describirla es con una colección de muchas imágenes diferentes”, explica.

Según relata, este mosaico de fotografías es lo que conforma un proyecto de éxito, puesto que la colección de imágenes aúna los fragmentos de la historia para mostrar “un poco de todo: su trabajo, su esfuerzo, el humo y la dureza del entorno”

Su proyecto en Calabria comenzó en mayo de 2019. Luigi se sintió atraído por la idea de documentar a los carboneros debido a que se dedican a una labor con raíces antiguas, propia de la región de Calabria, y que se transmite de padre a hijo.

¿Lo enfocó de la misma manera en la que hubiera fotografiado a otras comunidades a lo largo de su célebre carrera como fotoperiodista? “En cierto modo, sí, pero cada historia y cada sujeto son diferentes, por lo que es importante estar siempre preparado y tener la mente abierta. Tuve que encontrar los mejores momentos para hacer mi trabajo y mantener el ritmo de los carboneros para no causarles ningún inconveniente”.

En lo que respecta a su integración con sus sujetos, Luigi fue bien recibido. “Son muy amables y agradables, y aceptaron mi presencia, me explicaban su trabajo, me contaban sus historias y me invitaban a comer con ellos. Cuando hay un buen nivel de aceptación, confianza y amistad, como fue el caso, es fácil fotografiar, pero lo más importante es respetar a tus sujetos y sus historias. Es algo que he aprendido a lo largo de mi carrera y trabajar así me ayuda a ahondar de verdad en sus historias personales”.

Luigi, que lleva trabajando como fotoperiodista profesional más de tres décadas, conoce todo lo que debe hacer una cámara, pero también lo que no. “Una buena cámara para reportajes debe ser fiable, manejable y facilitar la parte técnica del trabajo. Esto me ayuda a concentrarme únicamente en la imagen y en lo que veo a través del objetivo. Mi α7R III es fiable, discreta y ligera, a la vez que profesional, y todas estas cualidades me permiten dedicar toda mi atención a la imagen. Disparar se convierte en un reflejo, no en algo en lo que debas pensar”, reconoce.

Realizar las sesiones en los inhóspitos parajes donde los carboneros llevan a cabo su labor fue más fácil gracias a algunas de las características de la α7R III: el autoenfoque avanzado de la cámara y el alto rendimiento de la ISO consiguieron resultados muy nítidos, tanto en los retratos íntimos de los trabajadores como al fotografiarlos mientras trabajaban entre nubes de ceniza y humo.

Para este proyecto, Luigi utilizó el FE 24-70mm f/4 ZA OSS con su α7R III, una combinación que, según sus propias palabras, “permite hacer frente a cualquier situación”. Utilizó el mismo objetivo para todas las imágenes, desde los planos amplios de las siluetas dibujadas en el humo de los carboneros trabajando, hasta las retratos sobrecogedores de los hombres cubiertos en ceniza. Así podía trabajar con mayor rapidez y reaccionar al instante, evitando al mismo tiempo el riesgo de cambiar de objetivo en medio del humo. Luigi nos explica que utilizó una ISO constante de 2000, que le permitía trabajar con velocidades de obturación más altas y menores aperturas para reflejar la aridez del lugar.

¿Da Luigi por terminado el proyecto? “No —afirma sonriendo—. Me encantaría volver en otoño y probar una luz y un entorno forestal diferente. Lo mejor de un proyecto a largo plazo es que puedes descubrir cosas nuevas a cada momento, quizá inesperadas, y conocer la historia cada vez mejor”.

Pero junto a su anhelo de descubrir cosas nuevas, ¿influyen las relaciones que estableció durante el proyecto en su deseo de volver? “¡Por supuesto! —reconoce sonriendo—. Cuanto más tiempo paso en un proyecto, más confianza tengo en el sujeto o sujetos, y descubro las imágenes más importantes para contar la historia adecuadamente. Debes dedicar ese tiempo a sumergirte en el reportaje para dar con su lado humano, la emoción, la pasión, la intimidad, la atmósfera y la historia. No quiero quedarme en la superficie porque sé que siempre puedo ir más allá”.